Las provincias del Litoral tendrán un definido
período de esplendor arquitectónico durante los años de la Confederación
Argentina, cuando bajo la influencia de sus caudillos provinciales se enfrenten
al poder absorbente de Buenos Aires y disputen su espacio de autonomía y
crecimiento. En tal sentido, ciudades nuevas como Rosario, Paraná y Concepción
del Uruguay competirán con las de tradición colonial, convirtiéndose en el
asiento natural de buena parte de la afluencia poblacional “gringa” de origen
inmigratorio, que a través de la arquitectura italianizante les otorgará una
singular impronta de referencia clásica. En el siglo XX -ya convertida en uno
de los centros industriales modernos del país-, Rosario se destacará por su
notable patrimonio arquitectónico racionalista y Art Déco.
Región Litoral / Parte 1
Región Litoral / Parte 2